La sesión de trabajo se celebra una semana después de la aprobación por parte del pleno de una resolución por la que se insta al Ejecutivo a diseñar un nuevo Plan Integral de Atención a las Personas con Discapacidad.

 

El CORMIN ha estado representado por su presidente, Javier Miranda; por la vicepresidenta de la plataforma de la discapacidad organizada en Navarra, Mari Luz Sanz Escudero; y por el coordinador del grupo de empleo de la entidad, José Antonio Delgado. 

 

Durante su comparecencia, el CORMIN ha reclamado la transversalidad de la discapacidad en toda acción política del Gobierno, tanto a nivel autonómico como local; la necesidad de invertir en la promoción de la autonomía personal, que permitirá retrasar la atención a la dependencia; y también ha insistido en la necesidad de la creación de una Comisión de Discapacidad en el Parlamento de Navarra, de acuerdo con ese carácter transversal.

 

Asimismo, ha reivindicado un sistema de financiación del sector con una suficiente dotación presupuestaria, que incorpore las nuevas necesidades fruto de la evolución social del sector. Este sistema, ha explicado el CORMIN, corregiría las actuales consecuencias “perniciosas” que inciden sobre el endeudamiento de las entidades, y debería incorporar las fórmulas necesarias de convenios plurianuales, conciertos, etc. para dotar de la estabilidad necesaria a los servicios de atención directa prestados por las entidades que articulan el sector de la discapacidad en la Comunidad y evitar así su endeudamiento financiero.  

 

También ha demandado que el futuro Plan Integral de Atención a las Personas con Discapacidad deberá tener la necesaria consignación presupuestaria que asegure la ejecución y concreción de las líneas y medidas que lo conformen. 

 

Además, ha instado a mantener las ayudas a los Centros Ocupacionales, Centros Especiales de Empleo, al empleo con apoyo y a la integración laboral, así como el cumplimiento de la LISMI y del artículo 9 de la Ley Foral de Contratación Pública.

 

En relación a la aplicación y desarrollo de la Ley Foral de Accesibilidad Universal y Diseño para todas las Personas, el CORMIN ha mantenido que  “se debe culminar con su regulación, ya que no tiene una aplicación efectiva por el momento en Navarra por los reiterados incumplimientos en sus plazos de ejecución”. 

 

En materia de educación, una de las demandas del CORMIN es que se debe garantizar la inclusión efectiva de las personas con discapacidad en el ámbito escolar de la comunidad, implementándose todos aquellos recursos humanos y materiales necesarios, en cuanto a apoyos, accesibilidad a las herramientas de trabajo, al mismo tiempo que ha indicado que se debe resolver “lo antes posible” el vacío existente en la Comunidad Foral acerca de la formación continua de adultos y la formación profesional de personas con discapacidad. 

 

Por otra parte, en cuanto al espacio sanitario, ha planteado la modernización del catálogo ortoprotésico e incluir los productos de apoyo de última generación que ofrece el mercado y que son los más adecuados para potenciar la autonomía personal de los usuarios; así como la minimización de los efectos del copago a través de límites meramente simbólicos de aportación para que las personas con discapacidad no queden excluidas de la prestación por razones económicas.

 

Otra de las demandas ha sido la adaptación de la normativa foral a la Convención de la ONU sobre los derechos de las personas con discapacidad. 

 

Entre otros aspectos, también se ha puesto de manifiesto el compromiso del CORMIN con respecto a la sociedad civil. El CERMI, del que el CORMIN es miembro, recibió en 2013 el Premio Roosevelt de derechos de las personas con discapacidad, en reconocimiento a su “relevante labor” como entidad de la sociedad civil en favor de los derechos humanos de las personas con discapacidad y en la aplicación de la Convención de la ONU, de la que el CERMI es mecanismo independiente de seguimiento.

 

Además, también se ha criticado que en el patronato de la Fundación CAN “no está la voz del Tercer Sector, ni mucho menos de la discapacidad organizada en torno al CORMIN”. En este sentido, el CORMIN ha mostrado su preocupación y ha instado a que se tenga en cuenta la aplicación de un sistema que recoja la representatividad de los diferentes sectores que tradicionalmente han sido los beneficiarios de la obra social en Navarra para la elección de los miembros del Patronato”.